lunes, 30 de junio de 2008

Argentina

Dejaré la primer parte de esta entrada en manos de José Pablo Feinmann, quien en un artículo publicado en el diario Página 12 del día de ayer, escribió unas palabras no sólo muy ilustrativas, sino también muy ciertas acerca del odio y de la situación actual que está atravesando nuestro país.

"(...) Si alguien pudo pintar: “Cristina vas a morir como Evita”, todo es posible. Si a Cristina se le endilgan insultos del calibre más bajo, más obsceno y si, para peor, son las mujeres las que principalmente lo hacen, uno se pregunta: ¿qué pasa? Supongamos que el gobierno de Cristina Fernández no le cae bien a un sector de la población, pero: ¿es para tanto? ¿Es para injuriarlo más que a Menem, que a De la Rúa? Sabiendo (y aceptando en alguna medida) que a otros gobiernos, sobre todo al militar, no se les dijo nada de esto.
Tomo un ejemplo. El cantante Ignacio Copani escribió una canción, (...) se llama: “Cacerola de teflón”. Debe tratarse de una crítica al sector social pro-agrario que se manifiesta en las calles con los utensilios que tiene en su cocina según su pertenencia en la escala social. Las cacerolas que tiene son de teflón. Copani canta su letra. Dice lo que tiene que decir y ahí empieza la invasión mediática. El “foro”, en Internet, tiene un anonimato que facilita la agresión y hasta el insulto más soez. Facilita la expresión del odio. De este modo, Copani dice que, a raíz de su canción, recibió algunos mensajes afectuosos. Pero: “Pero he recibido también otro tipo de contactos llenos de reproches, cargados de odio, regados de violencia, intolerancia, agresión y con un espíritu inquisidor que no creí que anidara todavía en gente de mi comunidad. He sido amenazado, agraviado, insultado, difamado, calumniado y, peor aún, han sufrido ese tipo de atropello miembros de mi familia. No me refiero a los impunes foros de Internet sino a e-mails, cartas y llamados recibidos”. ¿Qué pasa? ¿Dónde estamos viviendo? ¿Esta es la ciudad de Buenos Aires? ¿Esta es la capital cultural de América latina? ¿De dónde salió esta tropa de asalto, organizada, feroz, violenta al extremo de estar a las puertas de la agresión física?
Sigue Copani: “Aquellos que piensan que la Sra. Presidenta de mi país me paga por verso, recital u opinión, simplemente están expresando su propia escala de valores y asumiendo que ellos mismos podrían torcer sus convicciones a un precio determinado. Yo no”. Este es otro toque infaltable de este periodismo del odio. Afirma: todo aquel que se manifieste a favor de este gobierno lo hace por interés. En cambio, si “el campo” llena la Plaza ahí está la patria, la tierra, los valores centenarios, la clase rural que hizo la grandeza de la patria. Si la llena el Gobierno son todos gronchos traídos en los camiones de Moyano, o bandoleros de D’Elía, o desdichados que están ahí por un choripán. Y esto lo dicen periodistas con una trayectoria. Que de pronto se han erizado también de odio. Algunos de ellos cambiarán milagrosamente no bien el Gobierno arregle con sus patrones, con los grupos económicos para los que trabajan. La conversión ideológica del periodismo en los últimos tiempos ha sido vertiginosa. Incluso conozco mucha gente que lo detecta. “¿Viste? Fulano ahora ya no está en contra de Cristina”. “Y claro: si la empresa para la que labura arregló con el Gobierno.” Hay, sin embargo, un ingrediente genuino en este periodismo que acaso ni puedan variar, aunque el grupo mediático para el que trabajan les dé la contraorden: su antiperonismo. El odio gorila pocas veces penetró tanto en nuestra sociedad. Y peor aún: el odio a la generación del ’70. Lo peor que se le puede decir a alguien es setentista. Y al matrimonio presidencial se les dice sin más “la pareja montonera”, cuando jamás estuvieron en esa organización y no se ha discutido aún con claridad los dislates o no que ha cometido en nuestro país. (...)
Voy a citar ahora otro mail. Es de Hernán Nemi, que tiene 36 años, es profesor de Literatura en la Universidad de Morón, da clases en varios colegios secundarios y tiene un par de obras escritas para Teatro por la Identidad. (Esto lo torna muy sospechoso para la Argentina del odio y sus voceros comunicacionales. Porque la cosa también tiene este costado de destrucción fundamental: “¡Basta con esa cuestión de los derechos humanos! ¡Basta de juzgar a militares! ¡Basta de exhibir a Hebe de Bonafini en cada acto! ¡Ni a la Carlotto nos bancamos ya! ¡Eso terminó, es el pasado, hay que archivarlo!” O si no: “¡Hay que juzgar a los guerrilleros! ¿O no quedó alguno vivo?”.) Suscribo todo lo que dice Nemi, de modo que citarlo es hablar y decir por su medio, que es impecable, y exhibe una prosa inusual: “Se critica a Cristina por autoritaria: ¿qué otro presidente hubiera soportado cien días con rutas cortadas, desabastecimiento y amenazas constantes sin disparar un solo tiro ni reprimir en ninguno de los cientos de cortes de caminos que hubo? Entre el 19 y 20 de diciembre de 2001 murieron 31 personas en la represión del gobierno de De la Rúa a las manifestaciones populares. El matrimonio ‘montonero’ tuvo la actitud más tolerante y democrática frente a las protestas de la ciudadanía que se recuerde en toda la historia argentina”. Aquí sólo podríamos pulir la frase “toda la historia argentina”. Hubo otros gobiernos con tolerancia de democrática. Es cierto que, en este caso, el llamado “campo” ha paralizado el país y su abastecimiento. Se trata, sin más, de un acto de subversión absoluto que deteriora por completo el funcionamiento del país. Y a los piqueteros se los quería colgar por cortar una calle.
Sigue Hernán Nemi: “¿Es éticamente correcto que la clase media y alta de Buenos Aires salgan a golpear cacerolas por las retenciones del campo cuando jamás las golpearon por las flacas jubilaciones que cobran nuestros viejos ni por los chicos que tienen hambre, ni por los sueldos docentes, ni por la carpa docente, ni por la privatización vergonzosa de nuestras empresas en los ’90?”. Y también: “¿Tiene autoridad moral la Sociedad Rural de pedir más institucionalidad cuando apoyó a cuanto gobierno de facto hubo en la Argentina? ¿Este campo hoy indignado es el mismo que aplaudió a Menem a lo largo de la década del 90? Sí, es el mismo”. Es siempre el mismo, Hernán: es el que recibió con atronadores aplausos a Juan Carlos Onganía cuando el dictador entró en el predio de la Sociedad Rural... ¡en carroza! El que abucheó a Alfonsín. El que respaldó a la patria financiera en el golpe de mercado. El que apoyó a Videla y negoció con Menem. Hoy, en esta Argentina del odio, es la clase heroica que representa los intereses de la patria. ¡Y con los periodistas progres a sus pies!
Y, por fin, escribe Hernán: “Quienes piensan –legítimamente– que los ruralistas tienen razón, ¿por qué lo expresan a través de mails o comentarios tan agresivos, tan cargados de odio, tan faltos de argumentos racionales?, ¿qué nos pasa a los argentinos (y argentinas) que nos cuesta tanto bancarnos a una mujer como presidenta? Muchos de los adjetivos de esos mails –muchos de ellos enviados por mujeres– muestran el peor machismo: se la llama a Cristina ‘puta’, ‘conchuda’, ‘turra’, ‘tilinga’... Y al mismo tiempo, los argumentos brillan por su ausencia”.
Es así, Hernán: pero eso de bancarse a una mujer como presidenta no nos pasa “a los argentinos”, sino a ciertos argentinos. Y si hiciera otra política le tirarían flores. No es que no se bancan a una mujer, no se bancan una política. El poder, en este país, es pragmático. Si hacés lo que yo te digo, lo que yo necesito, lo que llena mis arcas, estoy con vos y sos hermoso. No lo olviden: si el establishment argentino se bancó a Menem, se puede bancar a Drácula. Al sólo costo de que Drácula haga lo que ellos quieren."

Me parece, simplemente, brillante. He tenido que omitir algunos pequeños fragmentos (sin descuidar la esencia del artículo) por una cuestión de espacialidad, pero abajo dejo el link para aquellos que deseen leer el artículo en su totalidad.

Un último dato que me resultó muy curioso. Mario Llambías (Confederaciones Rurales Argentinas) declaró que si se aprueba el proyecto oficial, continuará el conflicto en el campo [los lectores de este espacio pueden consultar el diario Página 12 de hoy, en "Una tregua que amenaza terminar"; también se ha difundido en diversos medios radiales].
Para los que aun no lo saben, levantarse contra el parlamento es anticonstitucional, representa un acto de sedición, ya que el poder legislativo no tiene recambio (valga aclarar que el poder legislativo representa a todo el país, por lo que ¿de qué patria hablan los representantes del campo que amenazan con nuevas protestas en caso de que no se cumpla con su voluntad en esta instancia parlamentaria?).

Con esta humilde invitación a la reflexión, los deja su servidor,
Helios.


*Para ver "El odio de estos días", por José Pablo Feinmann, haga click aquí: http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-106897-2008-06-29.html
*Para escuchar la canción "Cacerola de teflón", de Ignacio Copani, haga click aquí: http://es.youtube.com/watch?v=tZemS_7eVNY . Si está interesado en la letra y no la encuentra no dude en comentar y hacer su pedido (no olvide dejar su mail), el administrador de este espacio se encargará de hacérsela llegar.

sábado, 28 de junio de 2008

Ya ves

Ya ves, a veces me canso de ser hombre y también
me agota escuchar que todo va bien,
y ver tristes hombres mirando al sur,
y no existir si no me miras tú.

Ya ves, a veces me canso de perderte y saber
que estamos solos y no va a volver
Guevara para darnos la razón
de no verte tendida en mi colchón.

Y mientras tanto,
estrépito de andamios,
pateras y naufragios,
desvelan nuestro sueño.
Y mientras tanto,
si hoy se cae La Habana,
el día de mañana
¿quién será nuestro dueño?

Así yo canto para recordar
que sigues a mi lado,
que aun sueñas despierta porque así
vencemos el cansancio.
Así yo canto para recordar
que aun seguimos vivos,
si no ves más allá de tu horizonte
estaremos perdidos.

Ya ves, a veces me canso de ser libre, de ser
libre para venderme y caer
muerto donde mi libertad prefiera,
simpre al otro lado de tu frontera.

Ya ves, a veces me canso de mí y de no tener
valor para buscarte y cometer
todo delito que este amor exija.
"Quieta ahí, tus labios o la vida".

Y mientras tanto,
estrépito de andamios,
pateras y naufragios,
desvelan nuestro sueño.
Y mientras tanto
si arde Lacandona
si Marcos abandona,
¿quién será nuestro dueño?

Así yo canto para recordar
que sigues a mi lado,
que aun sueñas despierta porque así
vencemos el cansancio.
Así yo canto para recordar
que aun seguimos vivos,
si no ves más allá de tu horizonte
estaremos perdidos.


Que el poema hable (y lo hace) por sí solo.
Helios.

*Ismael Serrano, "Ya ves", en Los paraísos desiertos.

viernes, 20 de junio de 2008

Sueñero

Silbo en la oscuridad
animal sin reposo
torres de la vigilia
candela de los ojos
no sé que pueda ser
si una curva del tiempo
o un hueco en el corazón atento.

Trigo sobre el brocal
para que coma el hambre
y abajo el peligroso
agujero de la sangre
no hallo, no puedo ver
mas que la noche alerta
y el misterio detrás
de las puertas.

Sueñero, jinete sin descanso
sueñero, sobre un papel en blanco
sueñero, centinela de mi alma
sueñero, duérmete y dame calma

Llevo cada mitad
omo dos ríos gemelos
uno cruza la tierra
el otro fluye en el cielo
el de la oscuridad
no conoce el olvido
desvelado en seguir
lo perdido

Ay, este toro azul
fatigado y sediento
de correr tras la nada
como la luz y el viento
ardo sin preguntar
igual que lo hace el fuego
tal vez halle cantando
el sosiego.

Sueñero, enigma de un penitente
sueñero, andando entre los durmientes
sueñero, espina de las estrellas
sueñero, olvídate de ella.


De Helios para las peronas que aun buscan, que aun esperan.

*"Sueñero", Jorge Fandermole.

lunes, 16 de junio de 2008

el camino de la corcada


Muchos lo recorrían, y otros tantos lo negaban. Tal vez por compasión, pena, o incluso por lástima (estos últimos no eran muy queridos, y por lo general los comentarios apuntaban a pasar la tarde a costa de un alma que se perdía).
Tu coeficiente intelectual es de... en realidad, tu coeficiente no es, simplemente eso. "Pero no te preocupés che, la inteligencia no es algo con lo que se nace, se hace, uno la va construyendo"- dijo uno.
"Vas a ver como en la próxima te va a ir mejor"-dijo otra.
A todo esto, el interlocutor ya se estaba pegando el cono de helado en la frente. ¿Eso les parece racional? "¡Pero claro!-respondió uno- Me parece muy natural, son rachas, ya pasará".
"Fue un mal día no más, nada que no tenga solución"-agregó la otra.
Lo circunstancial pierde la gracia si abandona su condición esporádica.
"No pasa nada-afirmó uno- son eventualidades que se irán sucediendo, le dan gustito a la vida ¿no?"
"Creo que está un poco estresado no más"-opinó la otra.
La devaluación del estrés (como concepto proveniente del campo de la psiquiatría) está atravesando una devaluación muy importante. Hoy en día todo el mundo se estresa.
"No puedo más, estoy muy estresado"- se queja uno. Valga aclarar que la cuasa del estrés de éste se dbe a que hoy no durmió la siesta de cuarenta y cinco minutos que acostumbra tomar, por lo que no puede acontecer otra cosa que no sea el estrés. ¡Pobre alma!
"No, es que me peleé con mi amiga ayer"-dijo una.
"¿Tu amiga X?"-preguntó su interlocutora.
"No, la que conocí hace un mes en la fiesta de Y"-respondió.
Esta pseudo-aungustia, o angustia no-trascendental, se transforma automáticamente en estrés.
Pero no nos vayamos del eje de la discusión.
¿De qué se trata, entonces, la corcadéz (del arg. corco, int. corqui o corky, v. corquear, part. corcada, ger. corqueando.)?
No se engañen, corco puede ser cualquiera.
Helios.

domingo, 15 de junio de 2008

al rincón de mi abandono

No sabrás... nunca sabrás
lo que es morir mil veces de ansiedad.
No podrás... nunca entender
lo que es amar y enloquecer.
Tus labios que queman... tus besos que embriagan
y que torturan mi razón.
Sed... que me hace arder
y que me enciende el pecho de pasión.


Estás clavada en mí... te siento en el latir
abrasador de mis sienes.
Te adoro cuando estás... y te amo mucho más
cuando estás lejos de mí.


Así te quiero dulce vida de mi vida.
Así te siento... solo mía... siempre mía.

Tengo miedo de perderte...
de pensar que no he de verte.
¿Por qué esa duda brutal?
¿Por qué me habré de sangrar
si en cada beso te siento desmayar?
Sin embargo me atormento
porque en la sangre te llevo.
Y en cada instante... febril y amante
quiero tus labios besar.


¿Qué tendrás en tu mirar
que cuando a mí tus ojos levantás
siento arder en mi interior
una voraz llama de amor?
Tus manos desatan... caricias que me atan
a tus encantos de mujer.
Sé que nunca más
podré arrancar del pecho este querer.


Te quiero siempre así... estás clavada en mí
como una daga en la carne.
Y ardiente y pasional... temblando de ansiedad
quiero en tus brazos morir.




(...) La juventud se fue...
Tu casa ya no está...
Y en el ayer tirados
se han quedado
acobardados
tu percal y mi pasado.
La juventud se fue...
Yo ya no espero más...
Mejor dejar perdidos
los anhelos que no han sido
y el vestido de percal.(...)




Será cuestión de cantar el tango, con voz de sombra. Donde sea que te encuentres, voy a irrumpir en tus sueños con estruendo de contrabajo. Será cuestión, una vez más, de cantar el tango, con voz quebrada y con pena de bandoneón.

Helios.


Mario Soto, "Pasional".
Homero Expósito, "Percal".

viernes, 13 de junio de 2008

Sin embargo, se mueve


No te acerques demasiado a mi
hace un tiempo que estoy
respirando un aire viciado
que me sigue hacia donde voy,
No te acerques más,
la muerte ya no es
algo para confiar
instalándose en los días...
de rutina y soledad.
Ves sobre el horizonte naufragar,
las ruinas de la vida.
Como un montón de estrellas
dormirás, un sueño eterno.
Cada luz que ves, oscurecerá.
Los miedos dormirán a cada
resplandor, que intente salir,
de este cuento sin fin.*


Como un reloj con el segundero continuo. El tic-tac nos da la oportunidad de tomar una nueva bocanada de aire para poder afrontar el siguiente segundo, y el siguiente.
Sin embargo, se mueve.

Helios.


* Eppurse muove, "No te acerques..."